Para los que residimos en el Reino Unido, el dominio de COVID 19 en los medios de comunicación mundiales ha supuesto una distracción de la constante charla sobre el inminente acuerdo del Brexit, que, en comparación con una pandemia mundial, parecía algo trivial. Sin embargo, el periodo de transición ha terminado; hemos abandonado la UE, y es hora de afrontar los retos que ello conlleva. Una de las implicaciones más importantes para las empresas es la de que el Reino Unido se convierta en un tercer país a efectos de las transferencias de datos personales de la UE al Reino Unido.
De momento, sin embargo, todo sigue igual. Esta importante implicación se ha visto mitigada por un periodo de gracia de entre cuatro y seis meses para dar más tiempo a la Comisión Europea a estudiar si concede la adecuación al Reino Unido. "El efecto de una decisión de adecuación es que los datos personales pueden enviarse desde un estado del EEE a un tercer país sin que sea necesaria ninguna otra salvaguarda".
La concesión de más tiempo es un reflejo clave de la importancia de que los flujos de datos sean fluidos en un mundo cada vez más globalizado. De hecho, la transferencia de datos entre la UE y el Reino Unido es crucial para la futura prosperidad de ambos. La página web Instituto para el Gobierno señala que "los volúmenes de datos que entran y salen del Reino Unido se multiplicaron por 28 entre 2005 y 2015, y tres cuartas partes de esas transferencias de datos fueron con países de la UE". Cualquier restricción impuesta a los flujos de datos actuaría como una importante barrera al comercio, poniendo a las empresas británicas en una marcada desventaja competitiva.
Se está llevando a cabo una gran cantidad de trabajo paralelo para actualizar el Modelo GDPR o las Cláusulas Contractuales Estándar, como consecuencia de la Decisión Schrems II. Por lo tanto, si la decisión de adecuación va por mal camino, hay que trabajar para aplicar los nuevos CCE y, por supuesto, cualquier empresa con sede en el EEE que exporte datos a terceros países también tendrá que actualizar sus acuerdos de transferencia de datos.
Los próximos seis meses van a ser ajetreados, ya que el mundo de la privacidad de los datos sigue estando en un complejo estado de cambio. Mientras nos preparamos para lo peor y esperamos lo mejor, hablemos con un experto de El Grupo de Privacidad de Datos para poner en funcionamiento su programa de privacidad y permitirle concentrarse en generar ingresos con la tranquilidad de que cumple con la normativa de privacidad de datos, sea cual sea el resultado de la decisión de adecuación.
Fuentes:
https://www.instituteforgovernment.org.uk/explainers/future-relationship-data-adequacy
https://www.europarl.europa.eu/RegData/etudes/ATAG/2020/652073/EPRS_ATA(2020)652073_EN.pdf